Espejismo

   A veces creo verte.

   Paseo por la calle, tranquilo y como todos los días cuando, de repente, te veo a lo lejos, de espaldas a mí. Te veo de espaldas y cuando te das la vuelta desapareces sin apenas darme tiempo a pestañear, percatándome entonces de que tú no eres tú (quién sabe si, tal vez, en realidad nunca lo fuiste...).

   En tal instante, tras esa broma pesada, es cuando apareces una vez más en mi recuerdo, y se me antoja pensar que ese espejismo absurdo y repetido es fiel reflejo de lo que un día fue, de lo que un día creí tener y al final no. Entonces, aún sin estar presente, logras materializarte firme en mis pensamientos.

   A veces, en efecto, creo verte.

   Siempre dándome la espalda (tu preciosa espalda), jamás de frente... como si quisieras jugar conmigo, en silencio, para luego parecer arrepentirte.

   Y me doy cuenta de que el olvido es mentira, que la reiterada ilusión no es más que una traición del subconsciente, una erupción espontánea de recuerdos reprimidos que luchan con vehemencia por salir y explayarse a sus anchas: tal es la presión que hace indomables las grandes pasiones.

   Sí. A veces creo verte. De espaldas a mí, sin dar nunca la cara, pero siempre de igual manera: como una gran (des)ilusión...

6 comentarios:

Belén dijo...

Pasa de largo tu también...

besicos

Roxana Laura Ronquillo dijo...

A veces, los espejismos nos mantienen vivos, o logran que sigamos avanzando, hasta que encontremos el verdadero oasis...
Besos

Hoba W. dijo...

De pronto al leerte me vino a la cabeza una frase de Gloria Fuertes:

"Lo mejor del olvido es el recuerdo..."

Aunque no siempre es cierto, no...lo mejor del olvido es el olvido.

Un beso, me ha gustado aterrizar en tu rincón.

Rara Avis dijo...

Existe un tiempo para cada cosa, para perdonar, para enamorarte e incluso en este caso para olvidar, tal vez aun no ha llegado el tiempo de olvidar y cuando llegue lo sabrás...

Abrazos....

Principito Desencantado dijo...

El tiempo te hará olvidar, seguro.

Un abrazo fuerte!

Anónimo dijo...

Cuando los espejimos desaparecen lo más importante es rectificar el rumbo para no dirigirse nunca más hacia ellos. En el desierto tras un espejismo crearemos otro y si algo no nos salva moriremos de sed. Sed de amor por buscarlo donde no existe.

QUIERETE, está dentro de ti.