Romántico


Cuando el romanticismo tiene muchas acepciones, y no todas son válidas o alcanzables para todos, sólo cabe esperar que aquellos enamorados de las fantasías encuentren al cabo las razones de su existencia o mueran, satisfechos, en sus irracionales intentos...

  No me llames romántico, si con ello me tomas por alguien que ha encontrado el amor. Ya no soy aquél sentimental que añoraba lo que ahora se me antoja bien lejano. Ahora sólo pienso que tal adjetivo no me identifica; al fin y al cabo, tal como yo lo veo, no es un romántico quien ama y no es amado.

  Llámame virtuoso, vivaz y generoso. Pues sin serlo al completo, al menos considero ésta una búsqueda más palpable. Y sin saber si el soñar sigue siendo mi mejor o peor cualidad, ahí sí que acertarás si, en tu empeño, 'romántico' me sigues queriendo llamar.

  Te dejo que me tomes por loco, o por un temerario desquiciado. Discúlpame si me salto el protocolo y tus reglas estereotipadas. Lamento si mi idea del sentimiento difiere de la tuya y la de los tuyos. Pero yo, soñador empedernido, aún siendo veterano salvador de circunstancias, no puedo luchar contra la naturaleza terca de mi ser.

  Seguiré pues buscando en mis andanzas —de formas más o menos ortodoxas— drenajes efectivos que hagan fluir los sentimientos más profundos; haciendo volar mis fantasías más apasionadas y satisfaciendo, al cabo, mi innato romanticismo interior sediento de horizontes lejanos (y, lo admito, quizás igual de irrelevantes).

  Y ya sólo me resta decir que en esta búsqueda de mi propia cordura —perdida, tal vez, en aquel sentimiento frustrado—, si bien un día estuve loco de amor, hoy, porque sueño y soñar, siento que no lo estoy...

  ...pero sí conservo —intacta— mi natural pasión.

2 comentarios:

Belén dijo...

Amarás cuando te ames a tí mismo, y sepas lo que es sentirse amado...

Besicos

Pau Ocejo dijo...

coincido estrictamente EN CADA PARRAFO Y PALABRA, EN TODO.


ey tu, pasame tu mail asi chateamos o algo.